Otra vez huiste de tu amada aldea.
Otra vez fuiste ejemplo del descaste.
Otra ves al poblado detestaste.
Del que te redimes en misa atea.
Encima del hombro no hay perspectiva
para que Narciso mude a cardo borriquero.
Inamovible teórico obrero,
gustoso por retórica festiva.
En borrico y con tus cuatro jinetes,
como Jesús en Jerusalem entraste,
como Purpura Cardenal que ofende.
Con tu apego feroz por los billetes,
un premio donarán por como actuaste.
Esto no cambia, quien sabe lo entiende
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Dices rehusar a prosperas plazas
por amparar al menesteroso amigo,
sin diferenciar la paja del trigo.
¿Cómo quieres tu, ser rural?. ! BOCAZAS!
Y que bonito lo cuentas y explicas.
Y como el tonto de pronto se engaña.
Y como encantas a la musaraña.
Y la baba les cae cuando predicas.
Pero una palabra tuya no basta
para sanar a quien lo necesita.
¡ Más tajo !. Del falso trono desciende.
¡ Menos filosofía tan nefasta !
¡ Menos falsa humildad tan exquisita !
Y me repito , quien sabe lo entiende
©Giliblogheces
Él es mi Góngora y yo su Quevedo, o a la "gucinversa"
Dedicado a Pilar para mitigar sus nauseas
Música de acompañamiento:
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